
No se si será una señal de que octubre será bueno, o un fatídico mes. Quizás también es la forma del mundo de acordarnos que lo estamos matando lentamente y que aquello que nosotros, los hombres, le dimos el nombre de "calentamiento global", no es un fenómeno descubierto recientemente, es la renta vencida que se nos olvidó pagar al mundo. Es el recordatorio de ser cordial con quien te hospeda. Es la consecuencia que nos comenzó a alcanzar en la carrera que ibamos corriendo tranquilamente, sin mirar hacia atrás y mucho menos hacia adelante, sino abajo, vigilando cada paso que dábamos con los zapatos deportivos, sin pensar en el siguiente paso.
Si alguien sabe la razón de este fenómeno que sucede todas las noches, por favor que me explique antes de que los relámpagos se marchen y no pueda tener la oportunidad de mirar el cielo sin pedir una explicación.